Habitualmente en psicoterapia utilizo cuentos que me sirven para conectar con emociones que a veces son difíciles de nombrar o describir. El poder de lo metafórico salta filtros racionales que llegan a lugares diana y establecen comunicación directa con “yoes” infantiles y primigenios, recuperan sensaciones olvidadas y ponen palabras a emociones complejas. También nos hacen sentir que no estamos solas en el mundo, alguien más lo ha sentido y lo ha escrito y lo ha ilustrado… Suelo buscar aquellos que tienen una edición cuidada, los materiales, las texturas, ilustraciones expresivas y mensajes directos. Busco sensibilidad y emoción e intento alejarme de «lo cursi» y de los cuentos de adultos, no me sirven… demasiado enrevesados y con pretensiones poéticas poco acertadas, bajo mi punto de vista, claro.
En instagram voy colgando algunos de estos cuentos, lo he llamado: Cuentos no sexistas para crecer
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